domingo, 18 de octubre de 2009


 

El te fabrico con ruego y esmero

a su imagen y semejanza

Delineó tus impulsos y sentimientos

en mortal freno,

pinto líneas curvas

y las coloreó de miedo

arrancó tu sonrisa

y pego a tu rostro la tristeza

perdió tu mirada en peñascos de amaneceres

para que jamás te veas,

juntó tus manos y en rosario cadencioso las cerró,

para que nunca se abran.

Cuido todos los detalles

para que no veas, para que no escuches, para que no recibas

seco las flores de tus cabellos,

borro las mariposas de tu sendero,

despidió a tus sentimientos,

colgo de tu cielo

un firmamento vacio,

borró las estrellas como pudo y

con tinta indeleble

saqueo los sones de tu canto,

destruyo el espacio de tu lamento,

lleno tus ojos de lágrimas

y te condecoro con interrogantes,

borró tus renglones y trazó líneas de

silencio absoluto,

esparció el otoño y el frio,

en lo mustio de tu andar,

clavo grilletes a tu alma,

que desangra,

buscó una caja

y te guardo adentro

y en el momento final,

te cubrió de hojarasca,

te armó un altar de tierra seca

y en ritual de frenesí, de locura

te saco el hálito de vida

y de tus pies, manos, cuerpo y cabeza

colgo los hilos

y te puso a caminar

en el destino preciso

que trazaron sus dedos,

en conjuro perverso,

El te desdibujo completa y ahora

Te lleva a caminar su rumbo perdido.


 

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